Los nervios a flor de piel, son mis palabras para describir el Gran Premio de Malasia, lo que parece sorprendernos a todos, un Tilkódromo brindando este espectáculo. Pero a decir verdad, no fue la pista la principal protagonista, sino todo los elementos que hoy sucedian en ella.
El principal factor influyente fue la lluvia presente al inicio de la carrera, lo que hizo que todos los pilotos optaran por neumáticos intermedios, salvo algunos pilotos del final de la parrilla que utilizaron la opción de lluvia extrema. Poco después el equipo Sauber se la juega anticipando a su piloto Sergio Pérez y éste inmediatamente se coloca en la 3ª posicion, seguido por Felipe Massa, quien así logra colocarse entre los 10 primeros.
Vuelta 7, bandera amarilla y salida del Safety Car, todo el mundo a box y Fernando Alonso sale delante de Sebastian Vettel, quien estaba 4º colocado antes de la parada. ¡Aquí comienza la emoción!
Bandera roja, detención de la carrera, 50 minutos después se relanza por fin. En un desesperado intento por asumir el liderato Jenson Button comete un error al rozar su coche con Karthikeyan y nuevamente debe parar a boxes. Mientras, Sergio Pérez se coloca en segundo lugar y se mantiene así hasta que en las estrategias de pits un retardo en la salida de Hamilton le permite liderar por algunas vueltas al mexicano, que no se había detenido, seguido de Fernando Alonso.
Ferrari se la jugó en estrategias, un cambio de neumáticos le permitió al español de esta vez avanzar. Y mientras que ayer cuando Fernando se colocaba 8º y llamábamos decepcionante a Ferrari (y quizás sea así) pareciamos olvidar que quien lleva el número 5 en el monoplaza de Il Cavallino es un jinete de rodeo. Pero dejaré el asunto de Ferrari para el final del café.
HRT logra terminar la carrera con sus 2 pilotos, lo que les hace sentir que avanzan, y a pesar del Drive Through que recibió De la Rosa, concluir la carrera ha sido un logro. Mercedes nuevamente se pierde el domingo, aunque al finalizar la carrera Michael Schumacher terminase hoy con 1 punto en la tabla de pilotos, primero se vio afectado por Grosjean quien tras un pequeñoo roce le hizo girar en pista, aunque se reincorporó rápidamente. Por su parte, el francés de Lotus nuevamente es víctima de si: muestra talento que el mismo desperdicia por no mostrar autocontrol en sus emociones. Marussia, Caterham igual que en la anterior disputa sin comentarios al respecto ni puntuación.
Por otra parte, la mala suerte sigue acompanando al venezolano de la escuderia Williams, quien nuevamente deja la carrera en la última vuelta, esta vez con una rotura del motor, mientras que Bruno Senna, tras 4 paradas en pits, muy pacientemente avanza y se coloca en la 6ª posición detrás del Lotus de Kimi Raikkonen, quien además marca la mejor vuelta de la prueba.
Peor suerte corrieron Kobayashi y Vettel. Por un lado, el primero no logra terminar la prueba por problemas técnicos en los frenos y el segundo debido a un pinchazo de su neumático trasero, no logra su mejor prueba. Además, en las últimas vueltas su equipo le indicaba que detuviera el monoplaza inmediatamente, orden que el piloto ignoró seguramente debido a que llevaba sin radio desde aproximadamente la vuelta 15.
En Malasia quien nos hizo vibrar hoy fue el mexicano Sergio Pérez, que amenazó el triunfo de Fernando Alonso en las últimas vueltas de la carrera. Ambos comenzaron un duelo de vueltas rápidas, con respuestas mutuas, pero la mejoría del mexicano era notoria y comenzó a superarse él mismo en vueltas rapidas colocándose a menos de 1 segundo de Fernando Alonso. Su equipo le advirtió que tuviera cuidad, que necesitaban esa posición. Poco después, tal vez el ímpetu le jugó una mala pasada, y tras un error al perder el control del monoplaza, le devuelve la ventaja a Alonso quien supo mantenerse y defenderse, hasta hacerse hoy con el podio más alto. Me resultó gracioso que en la rueda de prensa le dedicara la victoria en primer lugar a su perrita Frida, fallecida reciemente, cuya foto pueden ver al final de este post.
Ahora vuelvo al asunto Ferrari, cuando en realidad se ve a un equipo que no logra conseguir llegarle a sus rivales pero que realmente a pesar de usar un mismo nombre pareciera tener 2 equipos. El primero sería «La Ferrari de Alonso», que ya vemos los resultados, y el otro equipo, el de Felipe Massa es que nuevamente el paulista termina incluso 3 puestos por detrás del motor Ferrari empleado por Toro Rosso y su debutante Daniel Ricciardo. Esto me hace creer que Fernando Alonso dirige un Ferrari mientras Massa quien aún hoy se dice sin presion ninguna, pareciera correr en Ferrado.